Guarda el producto en un lugar fresco y seco, alejado de la luz, para garantizar su eficacia. Si se produce alguna reacción, es aconsejable dejar de utilizarlo inmediatamente. Además, no superes la ingesta diaria recomendada. Evita el producto si eres alérgico o sensible a alguno de sus ingredientes. Si estás embarazada, en período de lactancia, tomando medicación o sufriendo alguna enfermedad, es aconsejable que consultes a tu médico o profesional sanitario antes de tomar este suplemento. Por último, los complementos alimenticios no deben sustituir a una dieta variada y sana. Mantenlo siempre fuera del alcance de los niños.

Las personas con afecciones médicas como enfermedades hepáticas, renales o cardiacas, o trastornos del ritmo cardiaco, deben evitar el uso de la berberina o consultar a un profesional de la salud antes de empezar a tomarla. Es esencial que te asegures de que la berberina es segura para tu caso concreto, ya que puede interactuar con otros medicamentos o agravar determinadas condiciones de salud. Consultar a un médico es siempre la mejor opción para garantizar tu seguridad al utilizar suplementos.